Aún tenemos un poco de resaca emocional, y es que este Sant Jordi hemos recibido tanto calor y afecto que no es para menos. Las más de 1.000 personas voluntarias han hecho posible un año más que Sant Jordi vuelva a ser la Diada especial que era para muchas personas mayores, ya que sin ellas no hubiésemos llegado a más de 3.500 personas mayores. Además, más de 3.500 rosas naturales y 800 libros han llegado a hogares y residencias el pasado lunes 23 de abril, haciendo partícipes de la fiesta a las personas mayores.
A la acción social se han añadido varias personalidades que han llevado una rosa y un libro a personas mayores para que así puedan celebrar la Diada de una forma aún más especial. Este año han querido participar personas del mundo de la cultura, como Àngels Gonyalons y Òscar Dalmau, de la restauración, como Carme Ruscalleda, y del deporte, como Sergi Bruguera, entre otros.
Nos despedimos de un Sant Jordi más con las personas que hacen voluntariado y las del equipo técnico, todas ellas comprometidas con la lucha contra el edadismo y la soledad no deseada, todas ellas singulares y únicas, que llegarán a ser tan grandes y singulares como las personas mayores para las que se han movilizado.