A medida que avanza el ataque de las tropas rusas en Ucrania, aumenta el número de personas en riesgo y en situación de vulnerabilidad. Ya son más de tres millones las personas refugiadas en países vecinos, especialmente en Polonia, una cifra que aumenta con el paso de los días.
En esta dramática situación, las noticias se centran en la situación de las mujeres y los niños, pero apenas se menciona a las personas mayores. Según la red internacional HelpAge, dos millones de personas mayores del este de Ucrania están en riesgo, o incluso en alto riesgo a causa de la invasión rusa.
En este tipo de conflictos, hay diversos factores que hacen que las personas mayores se encuentren doblemente victimizadas: les resulta muy difícil huir de las zonas de conflicto y, a menudo, se encuentran aisladas y sin contacto con su familia o entorno más cercano.
Además, para las personas con movilidad reducida es mucho más complicado refugiarse de posibles bombardeos o ataques, lo que las hace aún más vulnerables. Por otro lado, cuando se permanece en una zona de combate, las personas quedan aisladas sin acceso a medicinas, alimentos o a la asistencia necesaria.
Un estudio realizado por HelpAge en 2014 poco después de la anexión de Crimea por parte de Rusia, indica los riesgos particulares a los que se enfrentan las personas mayores cuando se producen estos conflictos, son los siguientes:
- Dificultad para huir o evitar los combates, lo que supone la separación de sus familias y un aumento del riesgo de exclusión social y el aislamiento. El 96% de las personas mayores encuestadas han sufrido problemas de salud mental relacionados con el conflicto.
- Riesgo alto de escasez de ingresos, ya que casi todas las personas mayores afectadas (99%) dependen de una pensión como principal fuente de ingresos, que puede ser impugnada si no pueden acceder a los puntos de pago.
- Falta de acceso a la asistencia sanitaria y dificultades para pagarla. El 97% de las personas encuestadas padece al menos una enfermedad crónica, y no poder acceder a la atención sanitaria puede provocar graves consecuencias.
- Malas condiciones de vida y falta de apoyo a las personas con discapacidad. El 53% de las personas mayores dijeron que necesitaban dispositivos de ayuda, como andadores, bastones y pañales.
Desde la Fundación Amigos de las Personas Mayores nos unimos al mensaje de la Federación Internacional Les Petits Frères, de la cual formamos arte, y mostramos nuestra solidaridad con el pueblo de Ucrania y con todas las personas afectadas por el conflicto, y reclamamos medidas de protección para las personas mayores y que se visibilice su situación de gran vulnerabilidad.
La red de entidades miembros de la Federación Internacional en Polonia, Rumanía y Hungría se está movilizando para prestar apoyo a las personas refugiadas que lleguen de Ucrania.
Para más información, o para realizar un donativo a las entidades de estos países, visitar la web de la Federación Internacional
Fuentes de la información:
Créditos fotografía: Dovile Ramoskaite